Durante el último Clásico del Astillero, disputado en el estadio George Capwell, hubo una situación que fue considerada como inoportuna y peligrosa por los asistentes. Nicolás Romero Ordeñana envió una comunicación a EXPRESO en la que denunció "la irresponsabilidad" de los organizadores.

Durante el último Clásico del Astillero, disputado en el estadio George Capwell, hubo una situación que fue considerada como inoportuna y peligrosa por los asistentes. Nicolás Romero Ordeñana envió una comunicación a EXPRESO en la que denunció "la irresponsabilidad" de los organizadores.
Romero indica que asistió a la tribuna de San Martín, para observar dicho compromiso junto a su hijo y un grupo de amigos. "Me ha sorprendido la irresponsabilidad absoluta de quienes decidieron y permitieron que haya en dicha localidad el número de espectadores que hubo", señala el aficionado, aclarando que adjunta fotos y vídeos para corroborar su acusación.
"En todos los pasillos, áreas de paso y de tránsito había espectadores, pues no cabían en las gradas, llegando incluso a ocupar el inicio de las escaleras. ¿No está prohibido bloquear pasillos y zona de paso en espectáculos públicos? Pero lo peor no es esto: todas las salidas de dicha general estaban cerradas con candados, lo cual, asumiría, debe ser prohibido por ley. Increíblemente, ya terminado el partido, el empleado del estadio que custodiaba las llaves y los policías que lo custodiaban a él se negaban a abrir las puertas", añadió. Romero espera que se tomen medidas para evitar tragedias en los estadios.
Diario Expreso
COMENTARIOS