Pese a las críticas y a la posibilidad que tuvo de interrumpir su proceso por la mala campaña en la Copa América Argentina 2011, siempre fue fiel a su planificación táctica y técnica. En esa ocasión dijo que la prioridad era llegar a un tercer mundial y trabajó para lograrlo.
Pese a las críticas y a la posibilidad que tuvo de interrumpir su proceso por la mala campaña en la Copa América Argentina 2011, siempre fue fiel a su planificación táctica y técnica. En esa ocasión dijo que la prioridad era llegar a un tercer mundial y trabajó para lograrlo.
Como parte de su planificación, incluyó asesorías sicológicas e “instaló” en sus pupilos una frase que para él es básica y que la volvió a pronunciar tras el triunfo ante los uruguayos: “Actuar con cabeza fría y con el corazón caliente”.
Gracias a ello, el colombiano Reinaldo Rueda logró que el rendimiento de la “Tricolor” como local sea el mejor de las Eliminatorias Sudamericanas desde que los “cafeteros” ocuparon el timón de la selección mayor de fútbol. A falta de una jornada para la culminación del proceso rumbo a Brasil 2014, Ecuador es tercero con 25 puntos (+5). Su rendimiento como dueño de casa se acerca a la perfección, con un 91,7%. Ganó 7 de los 8 cotejos que disputó como local. Solo uno, contra Argentina, terminó en empate.
Esa campaña tiene al combinado patrio a las puertas de inscribirse al tercer mundial. Sus compatriotas, Hernán Darío Gómez y Fernando Suárez, quienes llevaron al combinado ecuatoriano a los Mundiales de Corea-Japón 2002 y Alemania 2006, lograron 74% y 85,1% de efectividad, respectivamente, en el Atahualpa. En ambos procesos se disputó una fecha más ante Brasil.
Los once jugadores titulares que escogió para el último duelo ante los uruguayos, respondieron en el gramado del Atahualpa como él pensó. “Fueron muy solidarios y comprometidos, como se esperaba. Estoy muy agradecido”, añadió.
La tensión de las últimas jornadas tuvo inquieto al estratega en el banquillo, ante la “Celeste”. No pudo disfrutar ni un momento sentado. Observó de pie o en cuclillas, eufórico y con pesar. Por eso, tras la finalización estalló en lágrimas cuando recibió el abrazo de sus compañeros del cuerpo técnico.
Durante la rueda de prensa volvió a mostrar la imagen de sensibilidad al recordar la partida de Christian Benítez y de su padre, Blas. “Cuando nos abrazamos, le dimos gracias a Dios, a la memoria del ‘Chucho’ y a la memoria de mi padre”, contó con la voz entrecortada.
Fuente: El Telégrafo