El Ídolo recibe al Quevedo, penúltimo, obligado a pelear por la Sudamericana. El Barcelona recibe hoy al Quevedo en un partido que se antoja pequeño a primera vista. Con el Ídolo descabalgado de la pelea por la cabeza de la tabla, un objetivo que debería ser inherente a un club de su entidad, no parece que la visita de un rival casi desahuciado de la primera división vaya a generar grandes expectativas en la hinchada del cuadro torero.
El Ídolo recibe al Quevedo, penúltimo, obligado a pelear por la Sudamericana.
El Barcelona recibe hoy al Quevedo en un partido que se antoja pequeño a primera vista. Con el Ídolo descabalgado de la pelea por la cabeza de la tabla, un objetivo que debería ser inherente a un club de su entidad, no parece que la visita de un rival casi desahuciado de la primera división vaya a generar grandes expectativas en la hinchada del cuadro torero.
Pero el partido que se ve pequeño es en realidad muy grande. El mensaje que en el club ha repetido todo el mundo durante una de sus semanas más agitadas (por las denuncias de su capitán, Matías Oyola) ha sido claro: hay que lograr la clasificación a la Copa Sudamericana. Y ese reto empieza por no perder más puntos en partidos como el de hoy.
No es solo una cuestión de prestigio, lo es también financiera. En un momento en el que los jugadores divulgan los impagos y se reconoce desde todos los estamentos que las arcas no dan para hacer grandes contrataciones, quedar fuera de una competición internacional podría comprometer seriamente la configuración de la plantilla de 2014.
Antonio Noboa, presidente del Barcelona, reveló el viernes que de los 800.000 espectadores que asistieron en 2012 al Monumental se ha pasado a menos de 300.000 en 2013. Las taquillas de $ 20.000 le sirven de poco al club y un campeonato internacional aseguraría dinero y la posibilidad de sumar mejores futbolistas al proyecto.
ONCE NOVEDOSO. En estas circunstancias y con el clásico a la vuelta de la esquina, el Ídolo se juega hoy ante el Quevedo tres puntos que pueden ser vitales para su futuro. Y lo hará con una alineación condicionada por las bajas. No estarán, entre otros, Nazareno, Paredes, Vargas ni Medina.
Atrás, formando una línea de tres, se reencontrarán por primera vez desde hace un año Campos, Erazo y Perlaza. Arriba, Arroyo podría actuar como 'falso nueve' con el respaldo por la banda izquierda de Franzoia, que se estrenó como goleador el sábado pasado.
Mientras muchos empequeñecen el duelo de hoy pensando ya en el Emelec, el técnico Luis Soler tiene claro que el encuentro es tan grande como cualquier otro y que no hay que reservar a nadie ante un rival que viene de ganar sus dos últimos partidos.
"El Quevedo venía mal, pero cambió de entrenador (llegó José Mora) y empezó a sacar resultados", opinó el viernes. "Quizás no tenga mucho juego, pero sí actitud. Juega a lo suyo y lo hace bien. Tenemos que tener cuidado en las pelotas cruzadas y a balón parado".
Fuente: Diario Expreso